Panteón de Tala, Jalisco, México.

Me esperaba encontrar mucho más tumbas antiguas en este limpio y ordenado cementerio, sin embargo las tumbas antiguas pueden contarse con los dedos de la mano, son realmente muy pocas y necesitan urgentemente de rehabilitación. Lo normal de encontrar aquí es una infinidad de tumbas de forma rectangular y de una altura considerable que necesariamente necesitan de escaleritas (no sé por qué?), esto resulta muy propio de este panteón. También existen muchas figuras de vírgenes, angelitos y cristos, pero sin lugar a dudas la escultura que se lleva la atención es la figura de un tigre?  con grabados indígenas, entre ellos destacan grabados de calaveras, es una muy bonita escultura realizada en basalto que vale la pena visitar. Otra tumba de interés es la del Sr. Cura Pascual de Guadalupe Arreola, aunque en el lugar donde se encuentra su tumba aparece una placa de fecha con 1840?, es una tumba que se encuentra en un extremo del cementerio, muy bien cuidada, con bancas y un ambiente de armonía increíble que cuando estás ahí disfrutas el tiempo. También cabe destacar un grabado muy hermoso de color blanco de la tumba de Juan Valladolid. Otro detalle que me parece muy característico de este panteón es la presencia de lonas con memorias o recuerdos de personas fallecidas. En general muy bonito cementerio, muy bien cuidado y ampliamente accesible.

 

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