El Panteón de Belén es un cementerio antiguo localizado en la ciudad de Guadalajara, México. Dicho cementerio fue anteriormente una huerta del hospital civil, pero fue convertido en panteón en 1848. El Panteón de Belén es nombrado así por costumbre, mas su nombre correcto desde el siglo XIX es El Panteón De Santa Paula. El Pantéon de Belén se encuentra ubicado en la zona norte del Centro Histórico de Guadalajara, por su riqueza arquitectónica está protegido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia Y considerado Tesoro Arquitectónico Nacional.
Fue proyectado por el arquitecto Manuel Gómez Ibarra a solicitud del Obispo don Diego de Aranda y Carpinteiro. Su funcionamiento duró poco menos de 50 años, pues fue cerrado el 1 de noviembre de 1896. La decisión fue tomada por el Consejo Superior de Salubridad de esa época. Actualmente funciona como un museo que representa parte de la historia de Guadalajara, el cual alberga un sinfín de nichos (900 para ser exactos) de cantera rosa. Anteriormente en el centro se encontraba la capilla de los hombres ilustres que hoy se encuentran en la Rotonda de los Hombres Ilustres.
Después de servir como una fosa común para gente humilde, en al menos tres periodos de su existencia, el Panteón de Belén fue el depositario de los restos de la alta sociedad jalisciense del siglo XIX.
Aunque el panteón está clausurado para eventos funerarios, sigue abriendo sus puertas al público sólo con el fin de que aprecie su interior. Para ello existen recorridos turísticos en los que se muestran las tumbas y se cuentan leyendas.
El Cementerio de Belén fue también la primera Rotonda de los Jaliscienses Ilustres, ya que en su mausoleo central o principal se encontraban los restos de muchos personajes importantes de Jalisco, los cuales fueron retirados a mediados del siglo XX y colocados en la actual Rotonda a un costado de Catedral.
El Panteón de Belén fue abierto al público a mediados del siglo XIX y la última inhumación se realizó hacia finales del mismo siglo. En la Actualidad es un museo de arquitectura y es administrado por el H. Ayuntamiento de Guadalajara. La característica principal del museo-panteón son las tumbas y mausoleos majestuosos, la riqueza arquitectónica de los mismos y las leyendas que han hecho que el Panteón de Belén sea uno de los museos más visitados de Guadalajara.
El árbol del Vampiro
De hace unos días comenzaron a aparecer en las calles de la ciudad algunos animales muertos: gatos y perros en su mayoría, pero lo curioso es que estos animales tenían una característica en común, aparecían sin una gota de sangre y lo más curioso con dos orificios en el cuello. Después de todo, quien le daba importancia? pero lo peor de todo empezó unos meses después… encontraron niños muertos, sin sangre, la piel de ellos se presentaba tan blanca y amarilla que denotaba la falta de sangre. El Pánico no se hizo esperar, en todos los rincones y reuniones de Guadalajara no se hablaba de otra cosa. Al caer la noche imperaba la soledad en las calles. Toda actividad comercial y social fue apagada. La gente no salía al oscurecer y se quedaban en sus casas rezando por sus vidas y protegiendo a los mas indefensos: los niños.
Las autoridades cansadas de esta situación tomaron acción sobre este asunto, hubo una reunión entre las autoridades de la ciudad y se convocó a cualquier experto, estudioso o caza recompensas que los librara de esa maldición. Se presentaron varios candidatos, pero la mayoría eran simples aficionados, estafadores o gentes sin experiencia en el mundo de lo esotérico. Finalmente, tras una larga desesperada espera, pudieron dar con la persona indicada.
El hombre en cuestión les indicó que para hacer salir a un vampiro de su escondite, hay dos opciones muy útiles: la primera es quemar el lugar en donde se supone que mora. Aunque la noche aún no haya caído, la amenaza del fuego lo despertará; se verá acorralado y no podrá escapar, acosado por un lado por los enfurecidos vecinos, y por otro lado por la luz solar. No obstante, existía en este caso un problema: nadie sabía dónde se guarecía el vampiro. Surgió entonces la segunda vía: acosar al vampiro con el hambre. Así la segunda opción fue la mas viable. Pronto el pueblo fue un desierto: no hubo ni hombre ni mujer ni niño ni animal que se aventurara por las calles, ni por la noche ni durante el día. Previo a ello, por supuesto, habían acopiado gran cantidad de provisiones para soportar la espera.
Cuando hubieron pasado unas dos semanas, al caer el sol, el cazador de vampiros avistó a un hombre alto, blanco, rubio, enjuto, moviéndose con lentitud por calles periféricas de Guadalajara. Él y un grupo de vecinos armados con cruces lo siguieron y lo rodearon precisamente en el panteón de Belén, (es muy posible que el Vampiro haya tenido su guarida en el panteón) El vampiro, desesperado por la falta de sangre, intentó atacarlos, pero la fuerza del número lo derrotó y pronto fue prisionero de la partida. Mientras decidían que hacer con él, el cazador de vampiros fue determinante: No se deja vivir al vampiro, hay que destruirlo o eventualmente se recuperará y matará a todo el pueblo. Así el cazador de vampiros pidió rápidamente una estaca, los hombres tomaron de un árbol próximo una rama con la cual hicieron rápidamente una estaca. El vampiro fue muerto con una estaca clavada en el corazón, la cual atravesó su corazón y pecho, llegando a atravesar todo su cuerpo, además quedando la estaca clavada en tierra y también fue decapitado. El caza recompensas recibió su cuantiosa paga y se marchó… Pero algo salió mal, cuando se quiere acabar con la vida de un vampiro este debe ser quemado y sus cenizas arrojadas al viento en los cuatro puntos cardinales para que ni sus partículas más ínfimas no puedan reunirse jamás.
Al día siguiente la comunidad coloco lapidas grandes sobre el cuerpo, con la esperanza de que no surgiera otra vez por la noche. Después de muchos meses las lapidas fueron quebrantadas. Y un árbol salió de la tumba del Vampiro. Ese árbol todavía existe en el panteón y nació de la estaca que fue clavada en el corazón del Vampiro. Cuando la gente corta pequeños pedazos del árbol este sangra. La sangre provenía de las victimas del Vampiro.
Al día siguiente la comunidad coloco lapidas grandes sobre el cuerpo, con la esperanza de que no surgiera otra vez por la noche. Después de muchos meses las lapidas fueron quebrantadas. Y un árbol salió de la tumba del Vampiro. Ese árbol todavía existe en el panteón y nació de la estaca que fue clavada en el corazón del Vampiro. Cuando la gente corta pequeños pedazos del árbol este sangra. La sangre provenía de las victimas del Vampiro.
Está prohibido abrir la tumba, y por seguridad fue cercada, se trata a toda costa de impedir que el vampiro del Panteón de Belén regrese de nuevo.
Durante la noche se dice que puedes ver las caras de espanto de las victimas reflejadas en el árbol.
El árbol debe mantenerse vivo, porque cuando el árbol muera el Vampiro regresara y esta vez no habrá compasión. Actualmente, el árbol del Vampiro es protegido con un cancel. Como puedes ver en la foto siguiente el árbol está en buenas condiciones y mientras el árbol viva no tienes nada que temer…
Durante la noche se dice que puedes ver las caras de espanto de las victimas reflejadas en el árbol.
El árbol debe mantenerse vivo, porque cuando el árbol muera el Vampiro regresara y esta vez no habrá compasión. Actualmente, el árbol del Vampiro es protegido con un cancel. Como puedes ver en la foto siguiente el árbol está en buenas condiciones y mientras el árbol viva no tienes nada que temer…
El niño que le tenía miedo a la oscuridad: Nachito
Ignacio tenía un extraño problema desde que nació: miedo a la oscuridad y a los lugares cerrados. Sus padres le querían muchísimo y trataron de llevarle con los mejores médicos de la ciudad para encontrar cura a su extraña enfermedad, sin embargo no encontraron cura a su enfermedad. Era tan grande su miedo que sus papás tenían que dejar la luz prendida y las ventanas y puertas abiertas durante la noche para que pudiera dormir. Una noche sus padres asistieron a una reunión, para lo cual lo dejaron encargado a la servidumbre y con luces en su habitación, alrededor de su cuna se encontraban en cada esquina una luz, además de dejar las ventanas abiertas, así se dispusieron a asistir a la reunión mientras que Nachito dormía plácidamente.
Pero cuál sería la jugada del destino que esa noche hubo tormenta, el fuerte viento entro por las ventanas apagando el débil fuego de los cirios y azotando tanto la puerta como las ventanas de su habitación, con el fuerte ruido Nachito despertó en una total oscuridad, con relámpagos y truenos, desesperado grito a sus padres, lloro y el miedo crecía desmesuradamente, tan fuerte fue el shock por aquella situación que su pobre corazoncito dejo de latir… el miedo paralizo su corazón… aquel corazoncito de poco más de un ano había dejado de latir.
Al llegar sus padres cual no sería su gran desconsuelo, al encontrar la habitación cerrada, luces apagadas y el cuerpecito inerte de su niño. Con el ruido de la lluvia y la tormenta, además de la naturaleza de la puerta la servidumbre no escucho los lamentos y gritos de miedo de Nachito.
Así se sepultó el cuerpo del niño en el cementerio de Belén, todo transcurría normalmente…pero en la mañana siguiente cual sería la sorpresa de los empleados del cementerio al encontrar el cuerpo del niño fuera de su tumba, extrañados los empleados volvieron a colocar el cuerpo del niño en su lugar…y a la mañana siguiente los empleados no podían creer lo sucedido…el cuerpo de Nachito se volvió a encontrar fuera de su tumba… así pasaron varios días, hasta que avisaron a los padres del niño. La noticia se corrió como pólvora y las hipótesis fueron apareciendo, unos decían que el cuerpo estaba maldito y que la tierra lo vomitaba, otros decían que el niño era la propia reencarnación de Judas, en fin hubo tantas cosas que se dijeron, e incluso hubo gente que esperaba en las mañanas en la puerta del cementerio para ver el cuerpo del niño fuera de su lugar.
Los padres muy afligidos y entristecidos comprendieron que Nachito al parecer todavía tenía miedo aun después de la muerte. Por lo tanto, decidieron poner en el exterior el sarcófago y en cada esquina de la tumba colocaron todas las noches cirios para que con su luz iluminaron el sueño de Nachito, así desde ese día Nachito descansa, y algunas veces hace de las suyas jugando de noche alrededor de su tumba con los muchos juguetes que los nobles de corazón le llevan para que disfrute su fantasmal infancia…así que ya sabes, si visitas el panteón lleva un pequeño juguete porque si no… te arriesgas a que Nachito te haga alguna travesura.
Fuentes Bibliográficas:
http://elpanteondebelen.blogspot.mx/
Algunos Personajes que aquí descansan:
Esteban Alatorre: Abogado especializado en Derecho. Nunca aceptó un puesto público.
Joaquín Angulo: Miembro del Foro Jalisciense y gobernador del Estado.
Fortunato Arce: Médico eminente, perteneció a la Academia Nacional de Medicina.
Jesús Camarena: Diputado local y federal, gobernador interino, varias veces presidente del Supremo Tribunal de Justicia y gobernador del Estado.
Juan Carlos González Velázquez: piloto aviador en fuerza aérea mexicana.
Ramón Corona: Gobernador del Estado (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Juan N. Cumplido: Miembro de la Sociedad Patriótica de Guadalajara, diputado en varios congresos, vicegobernador de Jalisco, gobernador interino y gobernador de Jalisco.
Gregorio Dávila: Secretario del Ayuntamiento, diputado federal y local, secretario de Gobierno, inspector de la Guardia Nacional y gobernador del Estado.
Pbro. Severo Díaz: Historiador, director del Observatorio Astronómico de Ciudad Guzmán y de Guadalajara (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Enrique Díaz de León: Primer rector de la Universidad de Guadalajara, diputado federal y local (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Gral. Manuel M. Diéguez: Gobernador, precursor del Movimiento Obrero, estadista y legislador (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Pedro A. Galván: Gobernador del Estado.
Jacobo Gálvez: Constructor del Teatro Degollado (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Aurelio L. Gallardo: Escritor y poeta.
Manuel Gómez Ibarra: Arquitecto constructor del Panteón Belén.
Epigmenio González: Mártir de la Independencia.
Alfonso Gutiérrez Hermosillo: Poeta.
Ignacio Herrera y Cairo: Médico cirujano defensor de los indios en los litigios sobre la tierra.
Manuel López Cotilla: Educador, formuló el plan para el arreglo de la institución primaria, proyectó la enseñanza Normal y publicó los primeros libros de texto (sus restos descansan en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres).
Juan B. Matute: Ingeniero que se dedicó al trabajo hidráulico en la Hacienda del Estado y profesor del Liceo de Varones.
Gral. Silverio J. Núñez: Segundo gobernador del Estado de Colima.
Aurelio Ortega: Educador, director de la Escuela Normal de Varones, director de Educación.
Alfredo R. Plascencia: Poeta.
Dionisio Rodríguez: Abogado y benefactor, secretario del Ayuntamiento, diputado local.
José Rolón: Compositor.
Notas, Comentarios y Consejos.
Entre los pocos cementerios que he visitado este cementerio es uno de los más hermosos que he visto, está lleno de vegetación, misterio, leyendas, de tristeza y de secretos. Si lo vas a visitar y eres de aquellos que les encanta tomar fotos de este tipo de lugares les recomiendo llevar un telefoto para aquellos detalles que se encuentren alejados, ya que no está permitido pasearse por las tumbas y solo tienes que conformarte con lo que puedas captar desde los pasillos, también está prohibido tomar fotos con flash, el lugar esta padrísimo. Hay recorridos con guías que te platican toda la historia y leyendas del lugar, así como visita a las tumbas más sobresalientes o de mayor importancia. Las construcciones están llenas de... como decirlo....magia?, no... están llenas de secretos arquitectónicos que permiten el respeto y admiración por los restos de quienes ahí descansan, ...Increíble! Que decir también de los efectos visuales que posee...sus historias están increíbles, algunas de ellas muy hermosas y otras totalmente horribles y tristes. Otra recomendación si lo visitas es llevar un pequeño juguete... cuando lo visites sabrás por qué. Es un lugar que cuenta con muy buena seguridad y se encuentra muy limpio, y como está localizado en el centro de la ciudad a un par de cuadras te encuentras con restaurantes, tiendas, etc. así como taxis. Pero sorpresa si eres de los que presumen ser supermachos… también hay visitas nocturnas!!! Ayyy nanita!!! Quien quita puedas ver algún fantasma…
Fuentes Bibliográficas:
http://elpanteondebelen.blogspot.mx/
La leyenda de Nachito no es verídica, Ignacio Torres Altamirano no fue un niño, si no un Doctor que falleció a los 38 años, según su acta de defunción:
ResponderBorrarActa No. 611 Ignacio Altamirano. En la Ciudad de Guadalajara á veinticuatro de Mayo de mil ochocientos ochenta y dos á las doce y tres cuartos de la mañana, ante el Juez que suscribe, Agustín L. Gómez de cuarenta y un años, casado, comerciante, dijo: que hoy á las nueve de la mañana murió de una alteración natural del corazón el Señor Ignacio Torres de treinta y ocho años, médico, originario y vecino de esta Ciudad, casado con Rafaela Palomar, hijo de Francisco Torres y de Concepción Altamirano. Fueron testigos del fallecimiento y de este acto Miguel M. F. de sesenta y cinco años, empleado y Manuel Rivera de treinta y nueve, casado, propietario, de esta vecindad y sin parentesco con el finado. Se dió lectura á esta acta y conformes con el contenido, firmaron A. L. Gómez - M. Rivera - Mig. M. F.