Las esculturas
funerarias presentes a lo largo de todo el territorio nacional mexicano, se
presentan elaboradas en diferentes litologías. Así los bellos ángeles de rostros
perfectos y pálidos, elaborados a principios del siglo pasado se encuentran
realizados en roca de mármol, principalmente de origen italiano, y para ser más
específicos de Carrara. Algunos otros tantos ángeles también de la misma época (Panteón
de Oriente, Durango) se encuentran labrados en cantera (rocas volcánicas), y la mayor parte de ellas van en un rango de tonos de
color desde el rosado al beige claro. Muy raras son las esculturas y monumentos funerarios elaborados con basalto.
Después de 1940
son escasas aquellas obras esculturales que se hayan realizado sobre material
pétreo. El material que vino a sustituir estos materiales fue prácticamente el
concreto y actualmente es sustituido muy popularmente por el yeso y plástico.
Sobre el mármol
mundialmente famoso de Carrara en Italia, hay bastantes escritos e información,
caso contrario ocurre con los yacimientos pétreos en México, de los cuales solo
existen menciones muy escuetas. Sobre los materiales usados en México para la
realización de tumbas y mausoleos es muy notable el uso generalizado de cantera
(rocas volcánicas mexicanas) de diversos tonos, siendo los tonos más usados aquellos de
color rosa, rojizo y naranjas. En México no son raros los mausoleos y tumbas de mármol, aunque
el mármol fue usado principalmente para el uso de esculturas funerarias como
ángeles y dolientes. El material o roca usada en la construcción de monumentos
funerarios o tumbales depende principalmente de la geología existente en los
alrededores o proximidades de la localidad o de la ciudad en cuestión. La
provincia geológica de la Sierra Madre Occidental fué y es fuente de abundante
material pétreo de una calidad y color sorprendentes. Ejemplo de ello son las esculturas y
monumentos funerarios de una calidad y belleza increíble como las encontradas
en el Cementerio de la Purísima en Zacatecas, en el Cementerio de Oriente en la
ciudad de Durango, en el Cementerio de Belén y Mezquitán en la ciudad de
Guadalajara, entre otros. Compartiendo en común que estas ciudades se
encuentran localizadas dentro de la región de la Sierra Madre Occidental, la
cual geológicamente fue formada por gruesas capas de rocas volcánicas que
fueron el material explotado para realizar dichas obras y esculturas
funerarias, además de estas obras, también se utilizaron para construir los
principales edificios de las ciudades ya mencionadas. Fuera del área de
influencia de la geología de la sierra Madre Occidental se usaron otros bancos
de material de la localidad en cuestión o bien estos materiales fueron llevados
desde otros estados de la república o bien fueron importados desde otros
países, destacándose el país de Italia.
Otras rocas de
diferente color también utilizadas en las edificaciones tumbales en México, son
tobas volcánicas de tonos verdes. Mientras que escasamente o raramente son
utilizadas rocas volcánicas basálticas de color oscuro, estas últimas no fueron
utilizadas por su color así como por su extrema dureza. Existen otras rocas mexicanas utilizadas en menor proporción como son algunos granitos, pizarras, mármol, onix, entre otros.
Para profundizar sobre
las litologías usadas en México he investigado un poco en la web, de lo cual
resulto lo siguiente:
Mármol de Carrara, Italia
El mármol es una
roca metamórfica, su formación inicia con rocas sedimentarias calcáreas
(caliza) que son afectadas por intrusiones ígneas o cuerpos magmáticos
intrusivos, con lo cual afectan a las calizas, afectándolas con presiones y
mayores temperaturas, con lo cual las calizas se ven forzadas a tener cambios
físico-químicos con lo cual se genera un tipo de roca metamórfica: El mármol.
No todos los mármoles presentan las mismas características como son color,
dureza, composición, etc. Lo anterior depende de la cantidad de impurezas,
composición de la roca original, temperatura, presión, etc. al momento de su
formación, por lo que resulta raro encontrar yacimientos de mármol tan puros y
blancos. De hecho en un mismo yacimiento pueden observarse diferencias
sustanciales en la misma roca.
Carrara es
una ciudad de la provincia de Massa e Carrara, en la región Toscana de
Italia. Es el centro más importante de la industria italiana del mármol, con el
mundialmente famoso Mármol de Carrara, una piedra blanca muy prestigiosa que se
extrae de los cercanos Alpes. La ciudad se halla situada entre Portofino y
Viareggio, que se asoma al mar de Liguria y exhibe como fondo los imponentes
Alpes Apuanos.
El mármol de Carrara (para los romanos marmor
lunensis, o "mármol lunense") es un tipo de mármol, extraído
de las canteras de los Alpes Apuanos, recibe el nombre por la ciudad de Carrara.
Es Universalmente conocido como uno de los mármoles más apreciados por
su blancura (o con tonalidades azuladas-grisáceas), casi sin
vetas, y de grano fino de aspecto harinoso.
Carrara es el centro de una importante industria del mármol,
gracias a que en sus proximidades se extrae el famoso «mármol de Carrara». Todo
en Carrara nos habla de su mármol, comenzando por la Catedral de estilo gótico
románico, decorado con frescos y esculturas de los siglos XIV y XV. De
mármol son: la fachada, con el espléndido rosetón, la cruz del siglo XIV
situada en el altar, el recinto y el púlpito. Además, en la Plaza Alberica se
puede admirar el adoquinado con incrustaciones de mármol.
La extracción del mármol en esta zona de Italia tiene
orígenes muy antiguos. Ya en la Edad de Cobre el mármol se utilizaba para hacer
objetos de varios géneros, sobre todo en los equipos tumbales. Después, en la
Edad Romana, esta actividad obtuvo gran desarrollo: gracias al cercano puerto de
Luni, el mármol se exportaba en toda Italia y hacia otros países del área
mediterránea. El mármol de Carrara se consideró desde el principio como
material de lujo para los nobles, para construir columnas, estatuas,
decoraciones y objetos varios en sus villas; era utilizado incluso en algunas
obras públicas de los centros de las ciudades. Con los romanos se desarrolló una importante extracción y, desde la época
de Julio César (48-44 a. C.), bloques de este mármol blanco
fueron utilizados para las construcciones públicas de Roma y muchas
casas patricias. El Panteón de Agripa y la Columna de Trajano están
realizados con este material. La exportación se realizaba por el puerto
de Luni, de ahí su nombre de "marmor lunense".
A partir
del siglo V, la actividad extractiva se detuvo a raíz de
las invasiones bárbaras. La actividad y el comercio se reanimaron
en el año 1 000, con la difusión del cristianismo. En aquel periodo se
construyeron innumerables edificios sagrados, y el mármol de Carrara fue uno de
los elementos principales de las construcciones románicas y góticas. Eso se
debe sobre todo a los “maestros comacinos”, que difundieron este precioso
material, empezando por la región Toscana (en las ciudades de Florencia, Lucca
y Pisa, entre otras). Entre los varios maestros, se pueden mencionar a Giovanni
y Nicola Pisano, con sus obras en Pisa. La ferviente actividad de las canteras se debe principalmente a los
"maestros", como el caso de los escultores ya mencionados,
quienes lo utilizaban para sus obras en la Italia Central, como en
la Catedral de Siena con su púlpito gótico octogonal.
Fue el mármol
preferido por Miguel Ángel en sus esculturas, quien personalmente
seleccionaba los bloques para hacer sus obras, con los cuales después
creaba sus maravillosas obras, entre todas destaca la Piedad que ahora se puede
apreciar en la Basílica de San Pedro en Roma. El David fue la excepción: este era originalmente un
bloque de Carrara que pasó de mano en mano por otros escultores (Agostino di
Duccio y Antonio Rossellino) y terminó finalmente en el estudio de
Miguel Ángel, al que no le importó las pequeñas deficiencias de origen del
mismo.
La particular conformación de este mármol (su superficie
lisa, su color, etc.) se adaptaba muy bien a la búsqueda de perfección anatómica
a la cual aspiraban los escultores. En el siglo XVII también el gran escultor
Gian Lorenzo Bernini lo utilizó para sus obras, por ejemplo en la Capilla
Cornaro en la Iglesia de Santa Maria de la Vittoria en Roma.
Durante el siglo XX, el mármol de Carrara fue muy utilizado bajo el régimen
fascista; Mussolini incluso lo envió en algunos bloques a Jerusalén, para una
de las dos mezquitas de la Explanada de Jerusalén.
Los mármoles de Carrara se han utilizado a lo largo de la
historia como un material popular para esculpir. El mármol es en la actualidad
de uso común en los hogares como azulejos o baldosas para el piso y las
encimeras (mesadas). La piedra es especialmente valorada por sus
características estéticas y limpias. Aunque los tonos blanco y gris del mármol
de Carrara se conocen muy comúnmente, este mármol vienen en varios tipos. Las
diferentes variedades incluyen: Carrara blanco, Carrara blanco intenso y los
Carraras dramáticos.
Las variedades de mármol de Carrara son siete, y cada una de
ellas presenta características cromáticas y estructurales diversas.
- El mármol
Blanco: Es el más clásico y el más conocido. Su característica principal
es la pequeñísima presencia de impurezas.
- El mármol
Estatuario: Es el más apreciado, utilizado desde la antigüedad por su
color blanco marfil y su estructura cristalina. Es perfecto para el trabajo del
escultor.
- El mármol
Venado: Es el más común. De color blanco o grisáceo con venas grises.
- El mármol
Arabescado: Parecido al Venado pero con las venas que forman arabescos.
- El mármol
Calacatta: Muy apreciado y poco común, presenta venas de color
amarillo.
- El mármol
Bardiglio: De color gris
- El Cipollino
Zerbino: Presenta líneas marcadas de color gris verduzco, similar al
interior de una cebolla.
El Carrara blanco es el tipo más comúnmente conocido y
encontrado de estos mármoles de lujo. Es también identificado como el mármol
estándar de Carrara. A pesar de que "blanco" es el nombre del color
blanco, este mármol en realidad se ve de color gris claro. La piedra está
compuesta de vetas grises que pueden ser claras u oscuras y a veces cubren toda
la superficie. Es un mármol que tiene sus propias características y son únicas.
De todos los mármoles de Carrara, el Carrara blanco es el más accesible por su
precio.
Los tipos de mármoles de Carrara que se ven más claros que el típico Carrara
blanco son: el Carrara blanco venetino y el Carrara blanco statuario (Siena).
Ambos mármoles contienen vetas grises. A veces se pueden encontrar mármoles
blanco venetino con vetas doradas. Estas piedras son valoradas por su color
original y están disponibles en la misma cantidad de variedades que la variedad
más común Carrara blanco. El blanco statuario tiene un precio algo más alto,
debido al control de la coloración a la que es sometido.
Antiguamente los bloques se arrastraban hasta las laderas de
las montañas, para llegar al puerto marino de Carrara, de donde salían para
alcanzar los distintos destinos. Desde finales del siglo XIX, se difundió el
transporte del mármol en tren, gracias a la construcción de un trazado
ferroviario hecho a propósito. Esta ferrovía conectaba los principales
centros de almacenamiento de los bloques de mármol con las serrerías en llanura,
con el puerto marino de Carrara y con la red de los trenes nacionales. Esta
particular línea de trenes comerciales, conocida como “la marmifera”, funcionó
hasta el desarrollo del sistema de carreteras y el desarrollo de los medios de
transporte sobre rueda, en la mitad del siglo XX. Hoy en día la mayor parte del
mármol de Carrara se transporta con camiones hasta el puerto de Marina de Carrara
o a otros destinos. El resto del mármol en cambio se reduce en losas de
diferentes espesores, y lustrado para llegar a ser decoraciones, paneles,
escaleras y muchas otras cosas. Para las actividades de corte y lustro, existen
varias serrerías en la provincia de Massa e Carrara.
Son 3 los principales yacimientos que se explotan:
Fantiscritti, Ravaccione y Colonnata. En la antigüedad, la extracción se hacía
con cuñas de madera, que se insertaban en los huecos naturales de la piedra
para forzarla y romperla. Sucesivamente se utilizó el sistema romano de la
corte, con la cual se obtenían bloques de las dimensiones elegidas
gracias a canaladuras que se utilizaban para romper la piedra. Después se pasó
al hilo helicoidal, hasta llegar a la técnica actual de la cortadora a hilo
diamantado.
Hoy en día la ciudad de Carrara sigue siendo lugar de
referencia para escultores y artistas, que se reúnen aquí durante la Bienal
Internacional de Escultura.
Basalto ó Piedra Volcánica
La piedra volcánica
es un término local y popular que se usa para designar a los basaltos. El
utilizar el término de piedra volcánica presta mucho a confusiones, ya que
existen muchas rocas volcánicas, por lo que se denominación correcta seria
basalto.
El basalto es una
roca volcánica extrusiva, es decir es una roca que se forma por el enfriamiento
de magma en la superficie terrestre, por la extrusión o acompañando a las
erupciones volcánicas. Generalmente es una roca de textura vesicular o
amigdaloide, lo cual significa que es una roca que presenta una infinidad de poros
o pequeños huecos que pueden o no estar rellenados por otro material. Son rocas
de color negro a gris oscuro, por lo que su color limita el uso de esta roca en
el campo funerario, aunado a que posee una dureza mucho mayor que el mármol o
la cantera. Así por sus propiedades químicas y físicas esta roca puede durar
prácticamente a perpetuidad en un cementerio. Sus usos en los cementerios se reducen
a pequeñas lozas y lapidas. Sin embargo hay excepciones a esta regla y son muy
raros las esculturas que se hallan realizado en este material pétreo, ejemplo
de ello es la escultura observada en el Panteón de Tala, Jalisco.
La piedra volcánica
al igual que la cantera es labrada con técnicas como el desbaste, la percusión,
la fractura, la presión y el pulido.
Actualmente la labor
de “cantero” de roca volcánica está prácticamente extinto. Preservar el oficio
familiar, heredado de generación en generación desde hace varias décadas, ha representado
un reto para los artesanos de algunas localidades de México, que deben aferrarse a éste, debido a que es la
única fuente de empleo, con lo cual laboran principalmente molcajetes y
metates.
Cantera ó Toba Volcánica
La palabra “cantera”
en México tiene dos connotaciones, 1) Se refiere a un lugar donde se explota cualquier
material pétreo a cielo abierto, ya sea mármol, granito, caliza, pizarra, toba
volcánica, basalto, arenisca, etc., generalmente sus usos son para la industria
de la construcción, ya que estos materiales son usados principalmente como
pisos o bien en fachadas o baños. 2) Se refiere a aquella roca volcánica de
color rosado, rojizo, anaranjado, crema, beige o verde para usos de
construcción o de escultura.
La piedra cantera es una toba volcánica, es decir, es una
roca volcánica piroclástica, formada por la expulsión de material volcánico de
cenizas y otros, las cuales se depositan y acumulan en un terreno y al pasar el
tiempo van formándose como rocas. Existen en multitud de colores y tonos, el
color más común es el rosa o rojizo. También se encuentran colores como el
naranja, beige, blanco, crema, verde, entre otros. También tienen diferente
grado de dureza lo que implica diferentes usos y aplicaciones.
En México se cuenta con una gran cantidad de tobas
volcánicas, la Sierra Madre Occidental se encuentra formada por una gruesa
secuencia de tobas y otras rocas volcánicas. Así estados como Sonora,
Chihuahua, Sinaloa, Durango, Nayarit, Jalisco, San Luis Potosí, Zacatecas,
entre otros, cuentan con abundantes yacimientos de este tipo de roca.
En el cementerio de Oriente, en la ciudad de Durango pueden
observarse abundantes esculturas funerarias realizadas en cantera, que fue el
material en el cual realizó todas sus obras el escultor Benigno Montoya a
principios del siglo pasado. También pueden observarse en la mayor parte de los
cementerios de México tumbas y suntuosos mausoleos que se encuentran elaborados
en su mayor parte por cantera.
La cantera fue utilizada desde la época
prehispánica, llegando en la época colonial su máximo auge, pues fue usada para
la realización de los principales edificios coloniales de las ciudades como
Guanajuato, Zacatecas, San Luis Potosí, Guadalajara, Durango, México, Oaxaca,
Morelia, entre otras ciudades.
En la actualidad
es muy utilizada en la construcción como recubrimiento y manufactura de
elementos decorativos tales como fuentes, chimeneas, columnas, etc.
Fuentes
Bibliograficas:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, siente la libertad de escribir algún comentario, observación o critica, me dará mucho gusto conocerla. Gracias.